Gestionamos los riesgos de nuestro negocio

Históricamente, la gestión de riesgos ha estado presente en nuestra fábrica, sobre todo en aspectos directamente relacionados con la actividad financiera y con acciones relativas al medio ambiente. Actualmente es el departamento de Servicios Legales y Buen Gobierno —en dependencia de la Dirección General— el que tiene entre sus cometidos la responsabilidad de dar soporte a las diferentes áreas de la fábrica a la hora de encarar los diferentes riesgos. “Es clave identificar los riesgos que se derivan de nuestras actividades de negocio en una fase temprana. Nos permite gestionarlos con previsión y dar una respuesta”, explica Natalia Vera, responsable del departamento de Servicios Legales y Buen Gobierno. 

¿Pero qué entendemos exactamente por riesgo?

Un riesgo es la posibilidad de que ocurran eventos o cambios que tengan un impacto negativo en el logro de los objetivos de la empresa y de sus departamentos o en el cumplimiento o la funcionalidad de los procesos empresariales.

En este sentido, los distintos sistemas de gestión de riesgos se rigen, como indica Vera, por cinco principios: “Deben estar orientados al logro de objetivos; deben ser eficaces; tienen que dar importancia a la integridad, los valores corporativos y el cumplimiento normativo; defienden que los riesgos deben tratarse de forma activa y abierta y plantean que los riesgos deben asumirse de forma consciente y gestionarse adecuadamente”.

Sobre estas bases, el modelo de Gestión de Riesgos de Volkswagen Navarra articula su funcionamiento con la labor coordinada de tres líneas de defensa:

1. En primer lugar trabaja la línea formada por las propias áreas y unidades organizativas de la empresa, que son las responsables de identificar, evaluar, gestionar y controlar los riesgos relacionados con su actividad y trasladar su contenido al equipo de Gestión de Riesgos en el caso de que fuera necesario.
   
2. El equipo de Gestión de Riesgos constituye la segunda línea de defensa. Establece las normas, asesora sobre el sistema y gestiona procesos como el Reporting trimestral de riesgos (sobre riesgos operativos), el Proceso anual de GRC (sobre riesgos sistémicos) y los informes periódicos al Consejo de Administración, al CEO y a la marca Volkswagen sobre riesgos significativos y resultados. 
   
3. Por último, la tercera línea de defensa del modelo de gestión de riesgos es la Auditoría Interna del Grupo Volkswagen, que evalúa la eficacia de la gestión de riesgos en la fábrica y comprueba que las normas y los procesos definidos por el equipo de Gestión de Riesgos se implementan correctamente en Volkswagen Navarra.

Diferentes tipos de riesgos. ¿Qué particularidades tiene cada caso?

No todos los riesgos son iguales ni deben ser combatidos con las mismas herramientas. Los riesgos que pueden afectar a nuestra empresa poseen diferente naturaleza. Pueden ser operativos (relacionados con la propia actividad de la empresa), ambientales, sistémicos… Y cada uno de ellos requiere un tipo de reporte y diferentes herramientas. En este sentido, Volkswagen Navarra diferencia seis procesos de gestión de riesgos diferentes: 

Clave en la gestión de riesgos: trabajo en un ambiente speak-up

En términos generales (ya que, como muestra el gráfico anterior, cada uno de los sistemas posee sus peculiaridades y sus propias condiciones de funcionamiento), el personal directivo de Volkswagen Navarra (management) es el responsable y el dueño de los diferentes riesgos que puedan contemplarse dentro de la empresa, así como de las medidas implementadas para combatirlos y de sus controles posteriores. 

En otro nivel, los trabajadores asignados en cada área son, por norma general, los encargados de identificar los riesgos que hayan sido trasladados por los propietarios de los riesgos. Una función con la que los identificadores asumen, además, el papel de coordinadores del sistema, desarrollando las oportunas labores de gestión e información. 

¿Pero cómo se alerta inicialmente de la existencia de un riesgo? Aquí influye notablemente la existencia de una cultura de comunicación abierta en la fábrica, en la que cualquier trabajador que aprecie un riesgo pueda tener la posibilidad de comunicarse con su personal superior, para que éste pueda trasladar el riesgo y dar paso a su correcta identificación.

“Creemos que es muy importante que todos los trabajadores de Volkswagen Navarra convivan en un ambiente de trabajo abierto, en el que puedan expresarse y mostrar sus preocupaciones sobre diferentes aspectos relacionados con su trabajo, desde la apreciación de un tema que puede suponer un riesgo para la actividad de la empresa hasta una acción que pueda traspasar los límites de la legalidad. La propia estrategia de integridad y compliance Together4Integrity también insiste en este tema en uno de sus pilares, que lleva por título “Ambiente Speak-up”. Queremos que los trabajadores tengan presente la labor que se realiza dentro de la fábrica en el ámbito de la gestión de riesgos y que sepan que nuestro departamento está abierto para cualquier incidencia o circunstancia que consideren importante trasladar”, concluye Vera.